Por Guillermo Santamaría
Filósofo y escritor
Es difícil clasificar a Jostein Gaarder. Podemos decir que es un profesor, ya que enseñó durante años, que es un filósofo, ya que nunca ha dejado de pensar en las preguntas o que es un escritor, ya que ha escrito numerosos libros. El más famoso de ellos, El Mundo de Sofía, vendió millones de copias y llevó la historia del pensamiento europeo a un nivel asequible para todo el mundo.
Igual podemos decir que Jostein Gaarder es, además de una persona muy simpática, muy preocupada por nuestro planeta y un profesor que escribe libros de filosofía en forma de cuentos. Tuvimos el gran placer de hablar con él en el Centre de Cultura Conteporània de Barcelona, con ocasión de Kosmópolis 2006.
Guillermo Santamaría:
¿Puedes decirnos tu nombre y algo sobre ti?
Jostein Gaarder:
Me llamo Jostein Gaarder, soy un ciudadano del planeta Tierra, y un habitante del Universo. En cierto modo, mi vida empezó hace 14.000 millones de años, cuando se inició el Big Bang.
GS:
Sientes un interés profundo por la ciencia, ¿podrías explicarnos por qué?
JG:
Forma parte de mi identidad: pertenezco a la naturaleza, soy un primate, soy un vertebrado, por eso me interesa la ciencia.
GS:
¿Cómo definirías la educación?
JG:
Yo definiría la educación como la búsqueda para intentar comprender más sobre la vida.
GS:
¿Y cuáles deberían ser los objetivos de la educación?
JG:
El objetivo de la educación debería ser enriquecer la vida de la gente.
GS:
¿Cuál es tu definición de emoción?
JG:
La emoción es como una chispa que prende por dentro. Puede ser negativa, puede ser positiva, pero si salta la chispa, son emociones.
GS:
¿Cuál es tu emoción favorita?
JG:
El amor, sin duda, es mi emoción favorita.
GS:
¿Y cuál es la emoción que menos te gusta?
JG:
El miedo me parece la peor emoción.
GS:
¿Cuál es la emoción más importante cuando se pretende enseñarle algo a alguien?
JG:
Para enseñar, la emoción más importante es despertar la curiosidad de la gente, de los estudiantes.
Un marinero hace gala de su habilidad como narrador de historias, habilidad
que todo buen profesor debería tener según Gaarder. (Fuente: Wikipedia)
GS:
¿Y qué opinas de la utilización del miedo como una herramienta educativa?
JG:
No creo que la disciplina o el miedo sean buenas motivaciones para el aprendizaje.
GS:
¿Cómo debería ser el profesor perfecto?
JG:
Creo que el profesor perfecto debería ser un buen narrador de historias.
GS:
¿Y el alumno perfecto?
JG:
Si el profesor supiera contar buenas historias, todos los alumnos serían buenos alumnos.
GS:
¿Y cómo debería ser la escuela ideal?
JG:
En una escuela perfecta, se contarían muchos relatos, y creo que el profesor debería incitar a los alumnos a formular preguntas. Hay quien dice que el motivo por el que los judíos han ganado tantos premios Nobel es porque a los judíos se les pide que pregunten lo mismo de tres maneras distintas.
GS:
Si tuvieras la posibilidad de consumar un proyecto, el que tú quisieras, ¿qué harías?
JG:
Si tuviera el poder para hacer una cosa por la Tierra, lo que haría sería preservar la biodiversidad. Lucharía contra la extinción de especies.
GS:
¿Qué consejo darías al mundo, a las personas, a los niños?
JG:
Si tuviera que darle un consejo al mundo, mi consejo sería proteger el medio ambiente; dejar el planeta en un estado mejor que el que hemos heredado.